En un trasplante capilar la supervivencia de las unidades foliculares es un aspecto vital para obtener un buen resultado. Los diversos estudios científicos al respecto, demuestran que, existen varios factores que deben tenerse en cuenta para maximizar la supervivencia de las unidades foliculares trasplantadas en un injerto capilar, que en condiciones ideales tendría que llegar al 90%. Destacamos cuatro factores a tener en cuenta.
Durante todas las fases del trasplante capilar existe una manipulación de la unidad folicular. Esta manipulación debe ser cuidadosa, especialmente en la manipulación del bulbo, para no provocar ningún tipo de daño a traumatismo que comprometa su supervivencia.
Diversos estudios han demostrado que es necesaria la hidratación constante de la unidad folicular en un trasplante capilar una vez extraída del cuero cabelludo. Esta hidratación, que puede realizarse con suero fisiológico, en nuestra caso se realiza con preparados nutritivos que han demostrado una mayor supervivencia que únicamente con suero fisiológico.
Otro aspecto a tener en cuenta, y como ocurre con la preservación de órganos trasplantados, es la conservación de las propiedades de la unidad folicular en frío.
Por último, otro aspecto importante para la supervivencia de la unidad folicular en un trasplante capilar, es el tiempo de espera entre la extracción de la unidad folicular y su posterior implantación. Si bien, a menor tiempo de espera mayor supervivencia, estudios han demostrado que no existen diferencias significativas de supervivencia entre las unidades foliculares implantadas a los pocos minutos de su extracción de la unidades implantadas a las pocas horas de la extracción. De forma habitual, se implantan antes de las 3-4 horas del tiempo de extracción. Cabe decir, que unidades implantadas incluso a las 48 horas de su extracción han demostrado un alto nivel de supervivencia en un trasplante capilar.